Una vez diseñada la página web, no es cuestión de echarnos a dormir. En tal caso, nos encontramos al poco tiempo que lo que en su momento era una web moderna y llena de contenido, ahora es un espacio obsoleto que de ninguna manera será la imagen que querías mostrar al mundo.
Las tareas sobre las que tendrás que poner especial atención sobre tu espacio web estarán destinadas a gestionar las actualizaciones, optimizar el rendimiento, buscar enlaces rotos y buscar errores que eviten una mala experiencia de los usuarios de su página.
Primero tenemos que tener en cuenta que algúnas de estas tareas necesitarán de conocimientos técnicos y formación específica. Para esto sería aconsejable contratar con un programador que pueda ayudar con estas taréas. Tomar una opción profesional irá en proporción con el volumen de visitas y la complejidad de la aplicación web que gestiones. Si es está la opción adecuada para ti, puede contactar con WebPágina y contarnos en qué consiste su proyecto.
Lo mejor será centrarnos en qué podemos hacer.
Será de gran ayuda para tu web y sobre todo para los usuarios que lleguen a tu espacio, que la información que contenga sea redactada con contenido actualizado cada cierto tiempo. No hay nada peor al llegar a una página con contenido de interés y que tras leerlo te des cuenta que se escribió hace mas de 5 años. Sientes que es una pérdida de tiempo. Sin olvidar que muchos de los cálculos que los buscadores hacen sobre la calidad web se basa en la satisfacción de los usuarios. Que el contenido esté actualizado conlleva a una mejor y mas agradable experiencia de los usuarios lo que hará que navegen mas en tu web o que regresen pronto, y todos esos detalles se contabilizan y puntúan favorablemente.
Por tanto, revisa el contenido y actualízalo cuando consideres que empieza a verse desfasado o si tienes nueva información.
Normalmente, cuando redactamos contenido para la web solemos enlazar este contenido con otras páginas que suman y apoyan lo que estemos contando. Si abandonamos el cuidado de nuestro espacio, puede ocurrir que estos enlaces ya no lleven a ninguna parte porque la web de destino se haya actualizado, la página de destino ya no esté disponible o simplemente la propia web ya no exista. A esto se conoce como enlace roto y causan bastante frustración al usuario que intenta acceder a la información que le prometiste y no se encuentra ahora. Aunque al fin y al cabo no sea un error directamente de tu web, si recibirá la consecuencia de la frustración del usuario.
Deberíamos revisar los enlaces que ofrecemos en nuestra web y en caso necesario repararlos, sustituirlos o eliminarlos.
Es común el uso de gestores de contenido del tipo WordPress, Jommla o PrestaShop. Siendo el caso, estos modelos requieren de actualizaciones periódicas de los plugins que lo gestionan así como de los propios gestores.
Esta tarea requiere de revisión periódica y en muchos casos, dependiendo del gestor que estén usando, de conocimientos técnicos para llevar a cabo la actualización.
Si no tiene el tiempo o los conocimientos que se necesita, siempre puede contratar los servicios de mantenimiento con un técnico capacitado. Si es está la opción adecuada para ti, puede contactar con WebPágina y contarnos en qué consiste su proyecto.